Os presento a mi yaya (Abuela)

Después de muchísimo tiempo de no andar por aquí, os voy a hablar de alguién que nada mas conocerla, me conquistó por su nombre: la yaya.

Es la mami de Ella. Está bastante más arrugadita que ella y va más lenta, pero se rié como nunca había oido a nadie reir.

Es contagiosa, es una risa cariñosa, siempre acompañada con una mirada un poco perdida, pero llena de sabiduria, debe ser por esas cosas que le crecen en los ojos a los vejetes. Apenas me ve, pero me siente, creo que ha desarrollado un sexto sentido para no perderse nada de lo que hago cuando estoy con ella.

Ahora vamos a visitarla muy seguido, a un lugar donde abren la verja unas mujeres con bata blanca, se parecen a la veterinaria que tanta manía le tengo porque nunca se me acerca para nada bueno.

Le doy una buenas voces cuando la vamos a recoger o cuando la dejamos después de habernos metido una buena merienda. Jejeje, ese día me como los dos rabos del cruasan de ella y con lo que le gustan, ya tiene mérito que me los dé.

ELLA nos mira y nos entretiene con mucha ternura. Cuando no voy, Ella le explica las mil una rutinas que hago, se lo pasa bien y para asombro de todos, retiene todo, todo lo que hago o dejo de hacer, lo que le cuenta su hija o pregunta y eso parece ser que también tiene un mérito del copón ya que un bicho que se llama alzheimer se le está comiendo todo lo que tiene dentro de la frente…. me da repelus pensar en todo eso, que haría yo sin recodarla a Ella, a Ellos, los olores de mis colegas o los sabores de mis galletas o quedándome en mi futón mirando a ningún sitio. Yo espero estar vacunado contra eso ya que el otro día me metieron una inyección que me dejo ko dos días. Tenía un nombre de bicho también: Trivalente.

En fin, que estoy muy orgulloso de ser un rato de alegría para mi yaya, sé cuanto me quiere y cuanto la quiero y aunque no se lo diga, ella lo nota y se pone muy muy contenta.
Hasta me da besos y eso que es o era bastante escrupulosa, decía que puaggg…. babas, puagggg… pelos… jeje, pues ahora estoy convencido de que si le dejasen tenerme en su casa, me llevaba con ella y me cuidaba sin tener el más mínimo descuido, hasta en su cama me metía, jeje. Seguro.

Pues ahí os la dejo para que veáis que preciosa es.